Imagina un pueblo donde el tiempo se detuvo: calles empedradas que guardan secretos coloniales, un templo inca con piedras que desafían el rubor, y atardeceres sobre el Titicaca que pintan el cielo de oro.
Chucuito... donde el pasado aymara y el virreinato se dan la mano. ¿Te atreves a descubrirlo?