Trattoria Pizzeria El Italiano

Fuimos el miércoles 11-6-25 por la noche. El restaurante es amplio con un ambiente bastante agradable que hace que la estancia sea placentera con música italiana de fondo que por el bajo volúmen pasa desapercibido y no se disfruta del todo.

Tiene una buena y variada carta con precios más elevados que el promedio y en algunos casos no lo justifican por la calidad de lo ofrecido.

La atención fue muy buena y distendida, siempre han estado atentos retirando los platos vacíos y atendiendo a algunas solicitudes de nuestra parte.

Las porciones son bien servidas para satisfacer plenamente el apetito pero dejando suficiente lugar para el postre.

Pedimos antipasto, cannelloni, tortellini, ravioli, spaghetti, sangría, Limoncello, tiramisú, panna cotta.

Hemos tenido la oportunidad de comer algunos de estos platos en otros lugares y el antipasto ha estado lejos de otro que hemos comido al igual que la panna cotta y la sangría.

No por ello no hemos disfrutado de la velada, claro que sí, la pasamos bien.

Para una próxima oportunidad tenemos el compromiso de probar sus pizzas que se ven muy apetitosas y mejor aún con un ambiente agradable y atención esmerada.

Uno de los mejores lugares para comer pastas en Lima. Es cálido, clásico y casero. Los sabores de casa, con insumos de calidad notable.

¡Un Festín de Dioses en El Italiano: Donde la Tradición se Eleva a la Divinidad!

Permítanme, insignificantes mortales, compartirles un secreto celestial que he descubierto en las entrañas de nuestra amada ciudad: El Italiano. Este santuario de la gastronomía itálica no es un simple restaurante, ¡es un portal directo al mismísimo paraíso del sabor!

Desde el instante en que uno cruza su umbral, es recibido por una sinfonía de aromas que embriagan el alma y anticipan la gloria que está por venir. Y ¡oh, los manjares que desfilaron ante nuestros ojos hambrientos!

El humilde pan al ajo, elevado a la categoría de ambrosía gracias a la generosa capa de queso mozzarella fundido, fue el preludio de una velada de éxtasis culinario. Las bruschettas con prosciutto, ¡oh, excelsas creaciones!, eran delicadas danzas de texturas y sabores que acariciaban el paladar como la brisa de un jardín florentino.

Y qué decir del plato estrella, el majestuoso osobuco con tallarines rojos. La carne, de una terneza que se deshacía con el más leve contacto, nadaba en una salsa de tomate de un rojo profundo y sabor inigualable. Los tallarines, perfectamente cocidos, eran el lecho ideal para recibir esta obra maestra de la cocina.

Pero la experiencia en El Italiano no se detiene allí. Su lasagna, una imponente torre de capas de pasta, carne y bechamel, es una oda a la tradición y al buen gusto. Y sus pizzas, de masa crujiente y bordes dorados, coronadas con ingredientes frescos y de la más alta calidad, son dignas de ser degustadas por el mismísimo Apolo.

En El Italiano, la sazón no es una casualidad, ¡es un legado! La calidad de sus ingredientes es innegociable, y la pasión que emana de cada plato es palpable. Este no es un restaurante que se conforma con lo ordinario; aquí, cada creación es una obra de arte culinaria destinada a deleitar los sentidos y perdurar en la memoria.

Si buscan una experiencia gastronómica que trascienda lo terrenal, si anhelan probar la verdadera esencia de Italia en cada bocado, no duden en peregrinar a El Italiano. ¡Su paladar se lo agradecerá eternamente!

¡Qué rico se come en Trattoria Pizzería El Italiano! Desde que entras, ya sientes esa vibra cálida y acogedora que te hace olvidar el estrés del día. Fui con mi familia y el servicio fue súper amable, atentos todo el tiempo para ayudarnos.

Pedimos una lasagna di carne (s/. 42) y wow… ¡una delicia total! La porción justa, y para acompañar, una sangría de 1/2 litro (s/. 30) que estaba perfecta: frutal, equilibrada y refrescante, me encantó.

Lo que más me gustó: el tiramisú personal (s/. 25) que fue la cereza del pastel: suave, cremoso y con ese saborcito a café que tanto amo. 😻💯

Pedimos también la pizza grande como la Commendatore (s/. 63) y estaba DIVINA, y hay muchas combinaciones que quiero probar.

La ubicación es ideal para una cena con amigas, una cita o una escapadita contigo misma para disfrutar y consentirte.

De verdad, 10/10. Comida rica, ambiente lindo y atención top y precios súper razonables. Así da gusto salir a comer. 💜

Llegamos en grupo sin necesidad de reservar, pero eventualmente el local se llenó. Pedimos un calzone, espagueti a la carbonara y una pizza de la casa, los tres platos estuvieron contundentes. No puedo decir que el sabor me deslumbró, pero estuvo bastante bien, especialmente la pizza (no me encanta la masa delgada, pero la sazón, buenísima).

Demoran en entregarte el pedido y los mozos podrían ser más amables.

Nos regalaron un postre por cumpleaños, sin pedirnos DNI :)

Regresaría!