La Mar Restaurante

Si estás en vacaciones en Lima y quieres darte el gusto de un restaurante de talla internacional, seguramente La Mar va a colmar tus expectativas. La fila era larga pero la espera valió la pena… pedimos cebiche, causa limeña y un plato para compartir. Este lugar se hizo famoso por el cebiche así que probarlo es casi que obligatorio. Los precios son altos pero vale la pena pasar por ahí con tu familia. El ambiente es alegre y la atención excelente.

Tiene ese toque mágico y especial que lo distingue de la gran mayoría de oferta local. Ambiente alegre, agradable. Cócteles y vinos extraordinarios que hacen un buen balance con la variedad gastronómica. Sus postres son excepcionalmente buenos para un restaurante de comida de mar.

La comida, de los platos que están en las fotos q son dos ceviches, ambos neutrales bajo de sal y no destaca ningún ingrediente seri un ceviche bien light, pero en ambos ceviches el pescado fue diferente y en los dos casos el pescado está fresco pero el corte del pescado creo que estaba mal, por que era su carne muy fibrosa ( un ejemplo cuando comes un ceviche de toyo adulto), chicharrón mixto como de cualquier Cebichería ahí si había equilibrio entre la sal y el limon en la salsa criolla y la leche de tigre si estaba buena tiene 10 veces más sabor que los dos cebiches que elegimos y los pocos pescados que te viene no se siente tanto esa fibra en su carne ya q son más pequeños. El servicio siempre atento a cada mesa que les toca. El ambiente, mucho turista en grupos de 4 o 6 personas y nacionales muy poco, la música del ambiente y más el ruido de las conversaciones de las personas no hace un lugar acogedor para hacer sobre mesa solo es comer tus platos de fondo e ir por el postre a otro lado. No lo recomendaría para ir a comer ocasionalmente hay mejores opciones cerca del lugar.

Fuimos a comer recomendados por el chofer que nos llevó del aeropuerto al hotel.

La comida decir que estaba toda exquisita, pescado fresco y el arroz buenísimo.

El servicio en todo momento fue atento, amable y rápido y no dudéis en pedir consejo sobre los platos, porque acertaréis con lo que os digan los camareros.

El ambiente del lugar muy agradable, con música a un volumen correcto y una decoración acertada.

En general calidad/precio decir que vale la pena visitar Miraflores y este restaurante!

Espero volver antes de ir a España de nuevo, muchas gracias por la hospitalidad y profesionalidad!

Delicioso lo recomiendo ampliamente a los turistas como yo, mucha gente, esperamos como 15 minutos comando una cerveza cusqueña y de snack elotes secos pero cuando te dan tu mesa, empieza la experiencia, es demasiado rica la comida vale mucho la pena.