- lunes Cerrado
- martes 18:00–1:00
- miércoles 18:00–1:00
- jueves 18:00–1:00
- viernes 18:00–2:00
- sábado 18:00–2:00
- domingo 18:00–1:00
En este bar te sientes un miembro de la mafia italiana en New York en los años 30, con un ambiente escogido al detalle, una selección musical adecuada con artistas como Frank Sinatra y Dean Martin, un diseño de interiores que deslumbra dentro de su sobriedad y unos tragos dignos del paladar más exigente.
Consulte con el mozo y puedes mejorar los insumos de algunos cocteles que llevan Whisky con Macallan en vez de Jack Daniels, sin embargo eso no desmerita el cuidado con el que logran hacer arte en cada cóctel con los insumos de entrada. Yo me pedí un Manhattan y otros con nombres temáticos los cuales estuvieron exquisitos. También unas mini hamburguesas que también me gustaron.
La atención del personal estuvo a la altura del lugar en especial a la chica que nos trajo la cuenta la cual tuvo una cortesía y coordialidad genuina más allá de los profesional cosa que les aplaudo.
Toda la experiencia fue una celebración a la mafia italiana transportansore al cruzar la puerta a otro tiempo y dejándote apreciar los detalles sutiles pero también los evidentes para quienes conocemos un poco de lo que fue ese tiempo.
Lo recomiendo así no sepas de esa cultura son embargo cualquier conocedor va a sentirse en casa.
Lo único malo de este bar es que te deja la vaya bien alta frente a cualquier otro en la cuidad por eso estoy seguro que volveré en alguna ocasión especial.
Empecemos. El lugar tiene un ambiente que combina lo clásico con lo sofisticado: un speakeasy con una temática muy bien lograda. Desde el inicio, la experiencia fue inmersiva —me pidieron una clave para entrar, lo cual me encantó porque te hace sentir parte del concepto.
La atención fue excelente: el personal, muy atento y amable en todo momento. El espacio es pequeño, así que recomiendo ir con reserva previa. La música está a un volumen perfecto, permite conversar con tranquilidad y se alinea muy bien con la temática, aunque también mezclan toques más contemporáneos, lo que le da un buen equilibrio.
Es ideal para una salida con amigos, una cita casual o simplemente para pasarla bien en un ambiente diferente.
Y como siempre dejo lo mejor para el final: los tragos. Todos los que pedí estuvieron excelentes, especialmente el negroni —uno de los mejores que he probado. La preparación fue llamativa, y la atención del barman, impecable.
¿Lo único por mejorar? Dada la cantidad de gente, quizá no estaría de más contar con un barman adicional. Por lo demás, todo fue muy bueno.
Hermoso bar escondido!
La temática el ambiente bien pensado en los años 20s. Buena atención y buena música. Los tragos de autor muy buenos, recomendados !
Disfruté bastante la atención, la experiencia y la preparación de los cócteles. Es una carta con un adecuado balance entre lo innovador y lo clásico. Volvería pronto.
Uno de los mejores bares de Lima. Un speakeasy, con un ambiente acogedor, privado y de luz tenue. Tiene música en vivo pero con el volumen apropiado para poder seguir manteniendo una conversación. Tiene cócteles de autor, varias versiones de Negroni pero también pueden pedir otros clásicos que los hacen así no estén en la carta. La atención es de primera. Está dentro del hotel Westin, pueden acceder por la puerta principal y les indican dónde está.